Nuno Ramos. Heteróclisis y entropía de la materia
- Daniela Peez Klein
- 11 jun
- 9 Min. de lectura
A professora compartilhou com a revista o ensaio em espanhol "Nuno Ramos. Heteróclisis y entropía de la materia". Nele, a obra do artista paulista, Nuno Ramos, é explorada e analisada sob a perspectiva multifacetada e dinâmica que sua própria produção artística contém.
Nuno Ramos. Heteróclisis y entropía de la materia
Por Daniela Peez Klein
Nació en 1960 en San Pablo, ciudad donde se formó y ha desarrollado gran parte de su trabajo. Quizá sea un dato clave aquí que Nuno Ramos haya realizado estudios de forma institucional (licenciado) de filosofía en la Universidad de San Pablo (USP). En su sitio web se define “…pintor, desenhista, escultor, escritor, cineasta, cenógrafo e compositor.” Artista ecléctico, ha explorado sin timidez la música, el cine y la literatura y, sin embargo, no se define como músico ni cineasta ni escritor. Desde aquella supuesta no especialización, Nuno comenta en varias entrevistas que este no-saber le ha otorgado un lugar de enunciación distinto: “Eu não sei desenhar nem pintar. Eu não tenho nenhuma capacidade nesse sentido…técnica. Até com escrever. Como desde pequeno eu tento ser escritor, eu até tenho alguma técnica. Mas com artes plásticas eu não saberia fazer isso”. No obstante, Nuno valoraría saber dibujar. En el campo de la literatura, ha publicado Cujo (1993), O pão do corvo (2001) Ensaio geral (2007), Ó (2009), O mau vidraceiro (2010).
Nuno Ramos parece devorar todos los campos. En su obra plástica, parece desbordar un trabajo con la materia hasta su lenguaje literario. Esto responde a que su literatura invita sin sutilezas a una cosmovisión extremadamente singular en la que reina la materia. Mario Cámara (2014) señala: “Nuno Ramos husmea en esas zonas que aún parecen ´abiertas´, aquellas zonas no colonizadas por el poder del lenguaje y la razón”. En esa exploración de superficies, no distingue de forma clasificatoria, o más bien, se trastoca cualquier clasificación encarceladora/aprisionadora. Si quiere separar lo que parece (Pedras marcantônio (1998), quizás sea para encontrar,en un afán hiperbólico de viaje por la materia, más entre las partículas de lo que se supone unido.
El manoseo indiscriminado de Nuno Ramos crea otra noción de identidad, pertenencia y singularidad. Reflexiona Cámara (2014): “Rancière ha producido una definición interesante para pensar el trabajo de Ramos, ha hablado, siguiendo a Deleuze, de ´igualdad molecular de los microsucesos, de las individualidades que no son individuos sino diferencias de intensidad´”.
La materia con la que trabaja Ramos puede ser animal, vegetal, mineral. Todo se comunga, o más bien, entra en relación desde una perspectiva que inaugura menos una estética que un mundo. Postula una suerte de unicidad a partir de los singulares. En “Lição de Geologia” en O pão do corvo (2001):
Há uma camada de poeira que recobre as coisas, protegendo-as de nós. Polvilho escuro de fuligem, fragmento de sal e de alga, toneladas de matéria em grãos que vão cruzando o oceano transformam-se em fiapos transparentes depositados pouco a pouco para preservar o que ficou embaixo. (Ramos, 2001, p.9)
Sin embargo, no habría un adentro y afuera esencial, sino más bien una común situación de desamparo que Nuno Ramos trabaja en sus obras-instalaciones (Pele Cobra 1989, Fruto estranho 2010), una continuidad de contactos diversos pero no disímiles totalmente. En sus propias palabras en “Lição de Geologia”:
O motivo de seu fracasso, provavelmente, deve-se ao fato de a matéria de que se recobre ser ela mesma parte sua, compartilhando decepção –também ela quer ocultar-se, reproduzindo infinitesimalmente o movimento que deveria ser restrito ao caroço que lhe deu origem. (Ramos, 2001, p.11)
La materia se crea (auto crea) en series mediante asociaciones, roces, continuidades. No orden, sino sensación. Ordenamiento sensual del mundo. Si cualquier acción de catalogar supone separación, Ramos emprende una serialidad lábil y metamórfica. Las relaciones binarias de iguales o diferentes se resquebrajan en su escritura: la asociación matiza gradualidades (cercanía distancias de acuerdo a la ubicación). Como otro elemento más del paisaje, una política del mundo que no escala ni fragmenta, que contempla las uniones.
La cualidad de vivo está en el carácter de materia de todo; todo es materia viva y se reconfigura permanentemente. Lo vivo sería así lo que se halla en movimiento. En lo vivo se encuentran animalidades sin por ello despojarse del lenguaje. En “Peço ao vento” (O pão do corvo, 2001) nos llegan las voces de o leão y a leoa. En el lamento del león malherido, se erige una alabanza a su compañera, coronada por las fuerzas de la naturaleza: “A brisa vai percorrer sua juba espessa, depois abrir suas narinas” (Ramos, 2001, p.39). León que supone su ser en varias capas (“A minha carne fica aqui mas o meu cheiro voa”, p.39) pues la materia no es plana, siempre hay más de ella en todos lados. León que se transforma en el ambiente: “As folhas debaixo de mim estão vermelhas. Os insetos pequenos bebem ali” (p.40).
En “O velho em questão”, también presente en O pão do corvo (2001), conocemos una subjetividad atravesada por experiencias en diferentes cuerpos:
Sei que não vou ficar muito tempo assim e meu corpo, como um país estrangeiro, vai se encher de pelos, ou a casca rugosa, empedrada de uma tartaruga, ou os veios úmidos de um tronco escuro e antigo, ou a floração musgosa de alguma planta frágil. (Ramos, 2001, p.20)
Tal subjetividad trae una particular conciencia de sí: “Sei que não sou tudo mas parte [...] Quando foi que virei um cão sarnento e me tornei um lobo, quando foi que me tornei a praia?” (Ramos, 2001, p.19). Las transiciones son entre los cuerpos y las experiencias son situadas. Acompañado por las voces (“…caminhando guiado pelas minhas vozes e a mais rara delas, a voz das pedras […] A voz dos passos me alertava, A voz do sol me alertava.”, p.23) que representan las identidades, el protagonista de esta narrativa reúne las experiencias de las materias en que deviene: “Comecei a me masturbar com as lembranças do velho e fiquei sabendo o tamaño dos seios dela, o cheiro da vagina, sua perna branca e elástica me enlaçando” (p.29). Hacia el final, descubrimos que él es esa voz circulante y queda suspendido el interrogante de qué conforma esa identidad.
Desclasificar repensar clasificaciones en clave de asociación sensual -es decir, desde lo que los propios sujetos generan- significa repensar el propio mundo, barajar tocando las cartas en un movimiento continuo. Otras coordenadas posibles laten gracias a la operación revolucionariamente metonímica. Si las palabras son mundo y por ellas se regeneran las filiaciones (cual anfibios o gusanos mutando, re-creándose), entonces Nuno Ramos postula una pan-metamorfosis.
Como lugar de enunciación o máquina creadora, figuras como Nuno Ramos invitan a repensar el estatuto del arte y sus alcances. En Ó (Ramos, 2009,p.62) encontramos:
Como os êmbolos solitários penetrando a carne de outros substantivos? Intocada, inexausta, a tepaçaria do real a tudo se conecta, e a cada uma das próprias partes, mergulhado na completa produtividade do seu descanso, num sono sem imagens mas de carne. Então, como se acendessem a lâmpada, como se nos sacudissem pelos ombros durante um beijo, a luz amaecida vence a luz recente e o círculo do mesmo dia rompe o casco que buscaba ventura, sal e ilha, derruba o mastro onde a bandeira pirata tremulava. Esta,ps de volta á sala, nosso feitiço delatado, expostos ao desencanto das tarefas, à vizinhança das mesmas vozes, aos ruídos da televisão, ao velho périplo amarrado ao centro antigo, como bois na mó. (El resaltado me pertenece)
Cuerpo
El cuerpo, para Nuno Ramos, es múltiple. “Regras para a direção do corpo” (en O mau vidraceiro, 2010) se establece un cuerpo sin solemnidad, sin juicio moral, sin señalar cómo debemos leer: “Há um corpo. As asas. Os tufos. As fontes. Os sebos. Os cuspes. As porras. As pupilas límpidas, azuis ou verdes. Onde bate o pôr do sol laranja. Os órgãos. Os nacos sangrentos” (Ramos, 2010, p.81). Y la materialidad reunida incluye elementos algo extraños a las representaciones más convencionales sobre el cuerpo; aquí los fluidos corporales adquieren un estatuto central.
Es un cuerpo heterogéneo, formado por diferencias unidas (“Isso tudo vocacionado para funcionar- não como uma máquina, mas como uma multidão entusiasmada, tomada por um princípio único, marujos dirigidos por um capitão benquisto”, p.81) y con un concepto de subjetividad corrida (“Há a decisão quanto ao membro amputado, de considerá-lo alguém, um ser autônomo, dando-lhe sepultamento […] Como batizar uma perna, um seio, um dente do siso, um tufo de pelos?”, p.82). Un cuerpo mezclándose en ese entorno, a veces, parlante: “A resposta, com toda evidência possível, batia no cimo das árvores, no som dos primeiros carros, nas ruas vazias, molhadas, quando ainda era cedo, em que ele caminhava” (p.57). Retrata una corporalidad de una forma no moral en relación con los demás; Ramos genera una ética hacia el mundo que propone superficies de contacto movedizas y entrópicas:
Vá até o fim do corpo alheio, tirando dele o teu proveito. Morda a folha, arranque o caule, cave a terra, aprisione a luz em teu espelho, até que solte sua resina. Não recue nunca por medo do corpo do outro. Se te tocarem, toque de volta. […] Se te socarem, abrace o punho, como um boneco de piche grudento. Nada tema no corpo alheio. (Ramos, 2010, p.86)
Palabra
Con trayectoria en las artes visuales, incluso con una fuerte llamada a la presencia de la palabra en diversos trabajos visuales, la obra literaria de Nuno Ramos parece afirmarse un territorio propio junto a la escritura, aunque el autor haga de éste un campo movedizo: la palabra es puesta en sus límites (Jorge, 2010).
El lugar de la palabra en Nuno Ramos es marcadamente particular. Las palabras se hacen carne en sus obras plásticas (Aranha, 1991) y viven en su dimensión sonora (111, 1992). Valiéndose del concepto de coralización de Flora Süssekind, M. Cámara (2014) caracteriza la escritura de Nuno Ramos por su estilo coral, o sea, voces múltiples que se suceden. El ritmo seco de la mayoría de los poemas de O mau vidraceiro (2010) interpela y surge la pregunta: ¿La escritura puede respirar?
Florencia Garramuño identifica en Ó (2009) un trabajo del lenguaje como materia: “como materia física inclusive, que trascienda la mera reproducción ventrílocua de las cosas del mundo” (Garramuño, 2015, p.178). En un ida y vuelta, el lenguaje es materia y la materia habla.
Lenguaje como materia. La materia es moldeable, de la experiencia y el sentido. La lengua que se hace carne con sus otras obras; las palabras se adhieren para mostrar su oquedad parcial o para apuntar hacia su incompletitud. La no coincidencia perfecta de los nombres es recurrente en Nuno Ramos, en O mau vidraceiro (2010) una escena encarna dialógicamente -siendo dos más que la sumatoria de cada uno- este tema en “O nome disso” :
-Ossos, cimento, poeira podem formar palavras
-Concordo
-E nuvens e caules e bolas de futebol. E os intestinos de um gato. Todos podem formar palavras
[…]
-Alguma coisa permanece? (Com ironia na voz) Espírito?
-Chamo de estímulo – à imaginação, à atividade do leitor.
-E isso se separa da matéria, de qualquer matéria?
-Acho que sim. Porque se houvesse coincidência completa nada haveria para ler – a água seria apenas água de novo, a pedra seria pedra, a tinta seria tinta. (pp.58-59)
La palabra tiene materialidad pero no es reina, es parte de la materia sin ser soberana. En “Ninguém” (que también compone O mau vidraceiro), leemos un apoderarse de la palabra en su materialidad y por lo tanto en su potencia vital. Los poemas son, de este modo, parte del entorno, no existe un afuera. El estatuto de la palabra, del poetizar explota para ser mundo. :
Se não quero das palavras seu sentido, mas aquilo que carregam realmente, e do incêndio quero o fogo e não a rima […] então seria melhor apagá-las todas, às palavras, uma a uma, às negras, pequenas aranhas, livrando o dicionário dessa mácula, e beber o que foi tinta até a boca ficar preta e transformar a tinta em chuva, em tigre. (Ramos, 2010, p.55)
Escribe M. Cámara (2014) para aproximarse a algunos textos de Ó (2009): “…escritura material, a lo que Roland Barthes definía como un nuevo estado filosofal de la materia del lenguaje, la lengua como metal incandescente”. Los restos se incorporan siempre a algo. La transformación constante, una suerte de hormiguero, en que lo podre (putrefacto) nunca es totalmente descompuesto, deshecho. Siempre hay algo más, una forma inestable que no acaba.
Referencias
Antelo, R. (2011). La emergencia contingente. BOLETIN/16. 1-23. https://www.cetycli.org/cboletines/antelo_animalidad.pdf
Cámara, M. (diciembre de 2014). Materia invulgar. Bazar americano. https://www.bazaramericano.com/resenas.php?cod=451&pdf=si
Garramuño, F. (2011). Región compartida. Pliegues de lo animal-humano. BOLETIN/16. 1-14. https://www.cetycli.org/cboletines/garramu_o_animalidad.pdf
Garramuño, F. (2015). Mundos en común: ensayos sobre la inespecificidad en el arte. Fondo de Cultura Económica.
Jorge, E. (2010). Nuno Ramos: La Literatura, un muñeco de alquitrán. InterArtive. http://interartive.org/2010/02/nuno-ramos/
Ramos, N. (2001). O pão do corvo. Editora 34.
Ramos, N. (2009). Ó. Iluminuras.
Ramos, N. (2010). O mau vidraceiro. Biblioteca azul
Ramos, N. (2 de junio de 2025). Sobre. Nuno Ramos.http://www.nunoramos.com.br/
TV Cultura. [Roda Viva]. (19 de marzo de 2015). Nuno Ramos - 01/10/2012 [Video]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=fV4P2Sxg1Bk
TV Cultura. [TV Cultura]. (17 de enero de 2014). Provocações 370 com Nuno Ramos - bloco 02
[Video]. YouTube. http://youtube.com/watch?v=TqEjDKHgz9A
TV Cultura. [TV Cultura]. (17 de enero de 2014). Provocações 370 com Nuno Ramos - bloco 03
[Video]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=TCdpZqmGPj0
Comments